A veces surgen las cosas cuando uno menos se lo espera, el caso es que de una pequeña idea nace un Proyecto que si no hubiera sido por un cúmulo de casualidades, nunca hubiera existido.
Pero sucedió.
Nada hubiera sido posible sin el apoyo de Nuria, mi compañera en esta aventura de la vida, y verdadera guía para mi, que como siempre, impulsa y me impulsa. Y mis hijos, que creo que no se hacen a la idea del lio en que se ha metido su padre...
Fue suficiente con sugerirlo un día, para que todo se precipitara.
Que locura. Pero como se te ocurre pensar en hacer un camino en solitario desde tu casa hasta Santiago de Compostela? Nada menos que 1.250 kilometros por caminos, en bicicleta de montaña, sin mas compañía que tu mismo.
En ese momento, no tienes duda, lo harás, y eso ya no tiene remedio.
He razonado acerca de lo que me está llevando a esta aventura, llegando a la conclusión anterior. Son muchas cosas.
Uno ya va teniendo una edad, y creo que llega el momento de poner un poco de orden en todas esas experiencias, vivencias y demás que se van acumulando a lo largo de los años y que sin darnos cuenta quedan ahí, aparcadas, esperando su momento de reflexión.
He pensado que ha llegado el momento de hacer un punto y aparte. Todo lo vivido hasta ahora, y lo que proyectamos vivir en adelante, y para eso es necesario tiempo.
Dicen los entendidos en esto, que el Camino no empieza cuando echas a andar, sino cuando comienzas a pensar en hacerlo.
Y que razón tienen los entendidos.
Una vez ya has comprendido la necesidad que te empuja, te das cuenta que todo esta por hacer.
LA RUTA
La idea es hacer el camino en 14 etapas. Sale una media de 90 kilometros por etapa, aunque pueden haber cambios por imprevistos, tanto climatológicos, mecánicos o físicos.Saliendo temprano por la mañana dará margen para hacer frente a pequeñas dificultades que puedan surgir.
La media de velocidad prevista en movimiento es de 15 km/h, debido a lo accidentado del camino y el peso soportado. Si a esto sumamos unas dos horas de descanso por etapa, para comer, visitas, descansos, etc, resultan aproximadamente 8/9 horas diarias , sin contar imprevistos. Esto da tiempo suficiente para descansar tras la ruta y poder visitar las ciudades y pueblos que vayamos encontrando.
Para el diseño de la ruta he recopilado información de otros peregrinos que han realizado recorridos similares antes que yo, sobre todo el compañero de Castelldefels, que detalla excelentemente su camino en su blog.
Los tracks son los disponibles en Wikilock y sobre todo en la web Bicigrino. Gran trabajo recopilado allí, lleno de consejos, guías y foros donde resolver las infinitas dudas que surgen en los preparativos.
ETAPAS
1- Castelldefels-Montserrat-Jorba
2- Jorba-Lleida
3- Lleida-Bujarajoz
4- Bujaraloz-Zaragoza
5- Zaragoza-Tudela
6- Tudela-Agoncillo
7- Agoncillo-Belorado
8- Belorado-Hontanas
9- Hontanas-Sahagun
10- Sahagun-Astorga
11- Astorga-Villafranca del Bierzo
12- Villafranca del Bierzo-Samos
13- Samos-Melide
14- Melide-Santiago de Compostela
EQUIPACION
Para el viaje iré acompañado de mi bici, una Scott Spark 30 de carbono (Minerva) , que esperemos resista a todo el trote que le espera.
Así pues, en primer lugar, hemos de transformar nuestra bicicleta, ligera ella, en furgoneta.
Un buen soporte para las alforjas es necesario para que aguante todo el viaje con garantias. Confiaremos esa labor al compañero del Foro MTB, que los hace a medida.
Las alforjas deben ser estancas al agua y polvo. En este caso todo el mundo prefiere las Ortlieb. Escogemos el modelo Classic de esa marca. La bolsa delantera con porta mapas, también estanca, donde guardamos los objetos de valor para tenerlos más a mano , será de la marca Red Cycling.
Las cubiertas seran las que utilizo normalmente,y que siempre me han dado buen resultado: detrás Maxxis Larsen TT 2.0 , y delante Maxxis Monorail 2.1 ambas tubeless.
Utilizaremos GPS donde tenemos grabados los tracks de la ruta a seguir. Llevaremos nuestro viejo Garmin Edge 705, que a su vez hace de pulsometro y controla todos los datos de ruta. Muy práctico.
EL ENTRENAMIENTO
Los que somos aficionados al ciclismo de montaña, normalmente dedicamos uno o dos días a la semana a hacer un poco de entrenamiento, para después el domingo salir a "darlo todo".
Ese darlo todo significa darse tremendo palizón, para después de mas de tres horas, llegar casa gozosos y completamente hechos polvo, siendo necesarios dos dias para recuperarse.
Que felicidad!
El caso es que para este proyecto, el planteamiento debe de ser distinto, si queremos hacer mas de dos etapas seguidas con garantías.
Así pues, decido someterme a un plan de entrenamiento programado, que me proporcione una buena base.
Siguiendo los consejos del libro Planifica tus Pedaladas de Chema Arguelles, diseño el plan. Dispongo de 5 meses que distribuiré en dos periodos:
Entrenamiento de base (3 meses) repartidos en tres mesociclos consistentes en 4 o 5 días semanales de entrenamiento.
Entrenamiento especifico (2 meses), repartidos en dos mesociclos cada uno de ellos de 3 o 4 días semanales de entrenamiento, con distintos niveles de intensidad, según lo programado.
Todo esto me preparara a priori para hacer etapas de unos 90 km diarios, y me permitirá recuperarme para la etapa siguiente.
A medida que pasan las semanas de entrenamiento, mi preocupación, mas que por el cansancio físico es por el cansancio " postural". Estar sentado 8 horas diarias sobre el sillin de la bici, puede convertirse en una tortura...
